El reciente anuncio por parte del presidente Daniel Noboa, mediante un decreto ejecutivo, sobre el incremento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) de 12% a 15% a partir del 1 de abril de 2024, ha generado un amplio debate y preocupación entre los ciudadanos ecuatorianos.
Este incremento afecta directamente al precio de los combustibles y el gas, elementos esenciales en la vida diaria y en la cadena productiva del país.
Ajuste de Precios en Combustibles y Gas
A partir de la fecha indicada, el IVA aplicado a combustibles como la gasolina Extra, Ecopaís y el diésel experimentará un aumento en su costo por galón, siendo este de $0,06 para la gasolina y $0,04 para el diésel. En cuanto al gas de uso doméstico, el incremento se traduce en un adicional de $0,05 por cilindro en el depósito.
El decreto establece un tope para el precio de venta del gas licuado de petróleo (GLP) para usos domésticos, señalando que el cilindro de 15 kilogramos «no puede pasar de 1,65 dólares» en depósito. Es importante resaltar que este precio final para el gas doméstico representa un aumento mínimo respecto al precio anterior, buscando mitigar el impacto directo en los hogares ecuatorianos.
Implicaciones Económicas
Efectos en la Cadena Productiva
La subida del IVA en combustibles y gas no solo afecta al consumidor final en términos de gastos directos, sino que también tiene un impacto significativo en la cadena de producción y distribución de bienes.
Por ejemplo, el costo de fletes para el transporte de productos agrícolas entre ciudades importantes como Quito y Guayaquil podría incrementar entre 70 y 80 dólares, lo que eventualmente se reflejará en el precio final de los alimentos, impactando directamente en la economía familiar.
Incremento en el Costo de Vida
Los ajustes de precios en combustibles y gas derivados del aumento del IVA probablemente conllevarán a un incremento en el costo de vida. Servicios esenciales como el transporte público y privado, así como productos básicos que dependen de la logística para su distribución, verán incrementados sus precios, afectando la economía de las familias ecuatorianas.
Recomendaciones para Mitigar el Impacto
- Promoción de Alternativas Energéticas: Fomentar el uso de energías alternativas y renovables para reducir la dependencia de combustibles fósiles.
- Incentivos para la Eficiencia Energética: Implementar programas de incentivos para empresas y hogares que adopten medidas de eficiencia energética.
- Apoyo a Sectores Vulnerables: Establecer subsidios o ayudas directas a los sectores más vulnerables para compensar el incremento en el costo de vida.
- Educación Financiera: Promover la educación financiera entre la población para una mejor gestión de los recursos económicos ante el incremento de precios.
- Diálogo entre Gobierno y Sociedad: Abrir canales de diálogo entre el gobierno, sectores productivos y la sociedad civil para buscar soluciones conjuntas que mitiguen el impacto económico.
El aumento del IVA al 15% en combustibles y gas representa un desafío económico significativo para Ecuador. Si bien es una medida que busca ajustar la estructura tributaria del país, es crucial implementar estrategias que protejan a los sectores más vulnerables y promuevan una transición hacia una economía más sostenible y menos dependiente de los combustibles fósiles.
La adaptación a estos cambios requerirá de un esfuerzo conjunto entre gobierno, empresas y ciudadanía, buscando siempre el equilibrio entre la estabilidad económica y la protección social.
